Cuando pienso en todos los latigazos que enviamos a través de las palabras , recordé un antiguo refrán.. No hay peor loca que la boca..
Es un látigo invisible que puede llegar a tener mucho de ponzoña o de alabanza según a quienes vaya dirigida su sonido crispando el aire..
El siseo constante en las plataformas de una y mil verdades a medias me hacen reflexionar en la clase de humanos en los que nos hemos convertido, todos jueces y parte de la vida ajena..
Me he visto en mas de alguna oportunidad opinando sobre temas que de seguro no comprendo del todo, la política es uno de los mas nefastos a la hora de no querer enjuiciar y aún así lo hacemos.. ser parte de este mundo tiene sus desventyajas a la hora de embrutecerse mirando siempre los errores ajenos sin dejar espacio a los propios..
La lengua es un arma mortal.. en alguna ocasión me dijeron que yo era mortal con las palabras.. siempre creí que era parte de jugar conmigo al hacerme esas referencias quienes yo amaba y hacia partícipe de mis muchos momentos de ocio o de enojo..
Hoy ya pasados mis 50 años, lo veo en retroceso y me apena haber ofendido sin saber lo mucho que puede llegar a lastimar algo tan sensible como es la lengua o las palabras mal dichas o escritas..
No es lo mismo jugar a ser Draculina ( apodo de mi niñez por parte de mis hermanos cuando jugábamos a ser malos. siendo niños buenos ) a convertirse en una vampiresa a tiempo completo, bebiendo en cada palabra el odio encapsulado en gotas de vidas ajenas.. no es lo mismo juzgar a dar un parecer sin ofender.. no es lo mismo despedazar en base a pasados que ya no tienen regreso y herir abriendo viejas heridas..
Hoy todos son vampiros sedientos de sangre.. muchos esperan sentados desde sus cómodos sillones que los demás se despedacen por un ideal quimérico, mientras se sigue jugando con las palabras para hacer de este rompecabezas que es la vida misma un nuevo circo Romano .
Pulgares hacia arriba o pulgares hacia abajo está de moda, la lengua el nuevo látigo y tiene muchas ramificaciones porque todos nos prestamos para ofender reproduciendo cada palabra ... la moderna forma de hacer bajar la cabeza y asumir como cierto todo aquello que se escribe o se divulga de mala manera.. una nueva forma de usar paradigmas o metamorfosis colectivas, según sea la carta bajo la manga.
Un látigo que puede teñir de rojo muchos corazones, si la sensatez, a la hora de querer ser jueces nos hace ciegos ante nuestros propios defectos, dando por cierto que solo el enemigo es el malo..nosotros también pasamos a ser parte del enemigo de un alguien que no conocemos.
Al final, todos de una u otra manera bebemos el mismo cáliz de soberbia, apatía y sangre inocente en cada una de nuestras ventiladas y apresuradas conclusiones..
Hay que unirse en una sola voz, en un solo silencio, en una sola plegaria, llegar a ser verdaderos de la forma mas simple, actuando y poniéndonos en los zapatos del otro.. no hay enemigo, porque no existen los enemigos, solo hay un espejo reflejando nuestras propias debilidades y errores, a ello le llamamos enemistad... siempre hay alguien tomando nota de esa debilidad.
"Un error no se convierte en verdad por el hecho de que todo el mundo crea en él."
"Quisiera sufrir todas las humillaciones, todas las torturas, el ostracismo absoluto y hasta la muerte, para impedir la violencia."
Mi arma mayor es la plegaria muda. Mahatma Ghandi
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