Hace muchos años uno de mis hijos me bautizó como Pepe Grillo, si he de ser honesta, no tengo ninguna intención de hacer ver a los demás sus mentiras o faltas a la verdad a no ser que ello me perjudique directamente o a alguno de los míos.
Ahora me preguntan si quiero Evangelizar al mundo, nuevamente debo contestar que no, aquí solo escribo para reflexionar en voz alta aquello que no logro deshacer en mi mente, aquello que no entiendo y al final termina confundiéndome.
Si bien parece, no es así, este espacio es mi escape , de Pepe Grillo no tengo nada, cuando algo no me parece bien lo hago saber y no me identifico con el cuadro inferior a esta nota. No jalo orejas desde un teclado, lo hago en forma directa.
Y de si miento o no..pues, decir que no lo hago sería la primera mentira, solo trato de evitar hacerlo.
Cada uno de nosotros nació libre para decidir que hacer con su vida, es nuestro regalo divino.. así me enseñaron y eso lo respeto.
HAY CUATRO TIPOS DE MENTIRAS
Mentiras comunes: aquellas que se dicen cotidianamente. 2/3 ( DOS TERCIOS 75%) de las personas las usa de manera REGULAR según algunas encuestas. Son aquellas típicas excusas para justificar atrasos u olvidos imperdonables.
Mentiras serias: Se estima que 1/4 ( UN CUARTO 25%) de las personas acude a ellas con frecuencia. Corresponde a engaños más complejos, como ocultar consumo de drogas o relaciones sentimentales paralelas.
Mentiras autocentradas: Corresponde a aquellas mentiras que la persona dice para protegerse a sí misma. Por ejemplo, para evitar pasar una vergüenza o para no cumplir un compromiso indeseado.
Mentiras piadosas: Es una de las más comunes y su función es proteger a la persona a la que se le está mintiendo. Evitar contarle a una mujer que su marido la engaña.
Todos sin excepción en algún momento mentimos, por ejemplo, cuando redondeamos una cifra, cuando alguien nos pregunta el valor de algo o no queremos dar información que pueda perjudicar nuestro patrimonio o nuestra vida etc.
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